Un avión Boeing 767, de la compañía Excel, que cubría el trayecto entre Gran Bretaña y Egipto, aterrizó de urgencia en el aeropuerto italiano de Brindisi, al sur del país, después de que el piloto lo solicitara por sospechar que en su interior podría haber una bomba, informaron fuentes policiales.
La alarma se desencadenó cuando se halló en el bolsillo del asiento un papel en el que podía leerse: "Hay una bomba a bordo".
Cuando el avión estaba a setenta y cinco kilómetros al norte de Vieste, en el sur de Italia, el piloto solicitó poder aterrizar en Brindisi.
Tras aterrizar, los 200 pasajeros que viajaban en el aparto fueron evacuados y el Boeing sometido a una minuciosa inspección para verificar si eran ciertas las sospechas, sin que se haya confirmado la existencia de la bomba.