Los canasteros Jaime Lloreda y Antonio "Toñito" García se van del quinteto de baloncesto porque hay muchas "injusticias" con varios jugadores.
"No estamos de acuerdo con el trato que nos han dado", reveló ayer en una entrevista con Deportes-EPASA desde Japón.
Lloreda aclaró que hay varios jugadores que han cobrado 3 mil dólares y otros sumas que superan los 8 mil, y no es justo.
"Garcés no iba a montarse al avión en Puerto Rico, para viajar a Japón, pero lo llamaron aparte para negociar, y luego viajó con el equipo", sostuvo Lloreda.
El colonense admitió que hay "privilegios" con varios jugadores, y mencionó entre ellos a Eduardo Cotta y Rubén Garcés.
Aseguró que mientras Miguel Sanchiz siga presidiendo la Federación Panameña de Baloncesto, no volverá a jugar para Panamá.
Mientras que Antonio "Toñito" García reveló su no participación también en el equipo, por serias diferencias con la FEPABA.
Argumentó que "nosotros hemos cumplido con ellos (La Federación), pero ellos no lo han hecho con nosotros, y por eso me retiro del equipo", sostuvo.
García, uno de los mejores reboteadores de la selección nacional, explicó que con un comunicado enviado ayer a los periodistas panameños, se ha tratado de dejar la imagen suya y de Lloreda por el piso.
Además reiteró también que renuncia al equipo nacional, mientras Sanchiz presida la FEPABA.
Max Gómez, quien si se mantendrá en el equipo, explicó desde su habitación en el Hotel Prince en Hiroshima, Japón que a él lo tenían como una "sobra en el equipo".
"Yo si voy a jugar, porque si no lo hago, me devuelven de inmediato para Panamá", sostuvo.
"Aquí no hay diferencias con Vecchio, ni mucho menos entre jugadores, las diferencias que existen son con la Federación", añadió Gómez.
