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Las inspecciones de armas de las Naciones Unidas en Irak llegaron a su fin, declaró ayer el ministro de información iraquí, en la más clara expresión de rechazo de los intentos de Estados Unidos y de la ONU de reanudar las inspecciones en el país árabe.
Mohammed Saeed al-Sahhaf denunció que el gobierno estadounidense trata de exagerar el tema de las inspecciones, para agravar la más reciente crisis entre Washington y Bagdad.
En una entrevista con el canal de televisión árabe Al Jazeera, dijo que las afirmaciones estadounidenses de que Irak tiene armas de destrucción masiva son mentiras. "Las inspecciones en Irak han llegado a su fin", agregó.
Según resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, las sanciones impuestas a Irak por invadir Kuwait, en 1990, no pueden ser derogadas hasta que se certifique, de manera fehaciente, que Irak ha desmantelado sus arsenales de armas biológicas, químicas y nucleares, junto con los misiles que las llevan.
El Consejo ha exigido que Irak permita el regreso de los inspectores y Estados Unidos acusa a Irak de tratar de reconstruir su arsenal y de apoyar el terrorismo.
El presidente estadounidense George W. Bush, quien ha pedido la destitución del líder iraquí Saddam Hussein, ha amenazado con tomar medidas no especificadas si Irak no permite el regreso de los inspectores.
Han circulado versiones de que el gobierno de EU "planea un ataque militar a Irak".
CRECE OPOSICION AL ATAQUE EN EU
Mientras la Casa Blanca aún no se decide a lanzar un ataque sobre Irak, la posible campaña militar sigue ganando opositores.
Carl Levin, el demócrata a cargo del Comité de Servicios Armados del Senado, dijo que el Ejército de Estados Unidos es mucho más cauteloso en lo que respecta a ir a la guerra que los funcionarios civiles.
"Es casi seguro que si atacamos Irak, Saddam utilizaría sus armas de destrucción masiva como respuesta, porque no tendría nada que perder", afirmó el influyente senador. |
