Desde que los abnegados esposos Zárate aportaran al folclore nacional, hace más de medio siglo, mucho de lo que hoy se conoce de las manifestaciones folclóricas de las diversas regiones del país, han sido pocos los que han retomado esta, casi imposible labor en Panamá de investigar hechos folclóricos, que con los años se pierden en el total desinterés de las autoridades e incluso de sus herederos.
En tal sentido hay un caso de especial mención y es el profesor José Bolívar Villarreal, quien con esfuerzo propio decidió desde muy temprano investigar sobre temas totalmente desconocidos y para dejar plasmado un legado, que de no ser así se hubiera perdido totalmente.
Educador y egresado del Instituto Nacional, José Bolivar Villerreal ha realizado por años una labor callada de investigar, en especial sobre la fiesta religiosa del Corpus Christi, por lo que ha recorrido todo el país, en los punto donde se desarrolla esta fiesta religiosa de origen colonial y que tanto ha aportado a las manifestaciones del folclore, no sólo de Azuero, sino de todo el istmo.
Villarreal, es enfático al decir que sus investigaciones han sido parte de su propio esfuerzo, pues nunca ha recibido remuneración alguna para su desarrollo, pero ello no ha sido obstáculo para lograr su fines.
Con un conocimiento extenso y con base científica, Villarreal puede considerarse como el investigador más comprometido con temas tan desconocidos como es el caso de la Danza de los diablos Cucúas de San Miguel Centro, en la provincia de Coclé, a la que tuvo que dedicar años de trabajo hasta ganarse la confianza de los lugareños para lograr esculcar los secretos más íntimos de un ritual que data de la época colonia.
De padres originarios de Ocú, Villerreal es oriundo de Veraguas y su mayor influencia en la vida folclórica panameña la recibió de la innegable precursora del nuestro folclore - Petita Escobar-, siendo la directora del conjunto folclórico del Instituto Nacional, al que perteneció "una mujer negra de Antón con un estupenda voz para el canto del tambor", dice Villarreal al describir a la dama que tuvo el valor de sacar a flote aspectos hasta entonces desconocidos de nuestras tradiciones.
Desde entonces -Bolivar- fue abriendose camino y decidió hacer justicia hechandose al difícil, pero reconfortante trabajo de investigar.
Algunos de sus numerosos trabajos han quedado plasmados en la
Revista Lotería , con temas como: Los Quitipies de Antón (Revista Loteria 449), La danza de los Diablos Cuucas (Revista Lotería 387) por mencionar algunos.
En su más reciente obra: "Los Diablos Limpios de Santiago de Veraguas" pone al descubierto lo que con tanta vehemencia destaca al defender que el festejo del Corpus Cristie no pertenece únicamente a Azuero y que cada región del país tuvo en su momento una representación de este ciclo festivo religioso popular, así como la influencia del catolisismo en la diseminación de las danzas y la representación teatral que ello conlleva.
Pero su trabajo en el folclore no ha quedado en la investigación, pues su conocimiento lo ha llevado a dirigir agrupaciones folclóricas de instituciones publicas y privadas como el Banco Nacional y los Super 99 y desde hace décadas posee un grupo de diablicos.
DICTA CONFERENCIAS Y PONENCIAS SOBRE TEMAS DEL FOLCLORE.
Para Villarreal luego de años de trayectoria, el folclore ha ganado, pues en los albores de lo que hoy es un gran movimiento folclórico la lucha por vencer el concepto de "cholería" y menosprecio por quienes se atrevían a vestir y pregonar lo hermoso y valioso de nuestras manifestaciones fue dura.
Ojala algún panameño siga a línea de la investigación en donde se de a conocer lo valiosos de cada grupo panameño.
SU ULTIMO TRABAJO
Villarreal tiene a la disposición su última investigación "Los diablos limpios de Santiago de Veraguas", un tema totalmente desconocido para muchos.