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En Cativá se registraron leves inundaciones, que no causaron daños materiales.  |
Las lluvias de ayer viernes en Colón provocaron pánico en la población de Santa Isabel por temor al desbordamiento del río del mismo nombre, aseguraron residentes de la apartada región costera. Dorian Dangelo, técnico del Sistema Nacional de Protección Civil, explicó que por la falta de lluvias en el sector se acumuló mucha arena en la desembocadura del río, lo que provocó que el agua se represara y pusiera en peligro las viviendas que están ubicadas a pocos metros de la orilla.
El temor de los costeños era que se repitiera la tragedia que en 1996, dejó a la mayoría de la población sin hogar por la destrucción de sus viviendas que fueron destruidas por las fuertes corrientes del río Santa Isabel. Dangelo dijo que en otros puntos como Cativá se registraron leves inundaciones que no causaron daños materiales, mientras que en la ciudad el nivel del agua aumentó como de costumbre, pero empezó a bajar rápidamente.
Según las informaciones meteorológicas, las lluvias podrían continuar durante el fin de semana en el atlántico panameño, por lo que se ha recomendado tomar las precauciones necesarias para hacerle frente a posibles inundaciones.
DAÑOS EN NUEVA GORGONA
Por otro lado, dos comunidades del Corregimiento de Nueva Gorgona, distrito de Chame, resultaron afectadas por las lluvias que por dos días consecutivos se han registrado en Panamá Oeste, según un informe del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) en la región.
El desbordamiento de la quebrada Coloncito, en la noche del jueves, forzó a los habitantes de 30 viviendas, en los sectores de Nueva Gorgona y Coloncito, a abandonar las mismas, como medida de seguridad. Cerca de playa Gorgona se registraron deslizamientos de tierra, dejando como saldo tres familias afectadas, que fueron reubicadas en casa de familiares.
Mientras tanto, Narciso Martínez, morador del área, se encuentra en un centro médico, luego de recibir la descarga eléctrica de un rayo. En total suman 82 personas las afectadas por el desbordamiento de la quebrada, que afectó severamente algunas de las casas, imposibilitando el regreso de sus ocupantes, quienes han sido ubicadas en residencias de familiares, mientras que otras optaron por retornar a sus hogares. |