Las nuevas restricciones de EU a Cuba, vigentes a partir de hoy, han reanimado el debate sobre un cambio democrático en la isla y podrían minar el apoyo electoral del presidente George W. Bush en Florida, aseguraron los expertos.
Las medidas aprobadas por Bush para acelerar la transición hacia la democracia en Cuba limitan los viajes de los cubanos residentes en EU a la isla y las remesas, lo que ha causado malestar entre una parte del exilio cubano en el país.
Expertos consultados por EFE señalaron que el peligro para Bush, que busca la reelección en noviembre, es que las medidas se reviertan como un bumerán.
A partir de hoy, las visitas a miembros de la familia directa, antes permitidas una vez al año, sólo serán posibles una vez cada tres años y estarán limitadas a 14 días.
Se calcula que unos 117,000 cubano estadounidenses y más de 60,000 residentes visitaron Cuba el año pasado.