El secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell, instó a Sudán a poner fin a los ataques contra la población civil en la región de Darfur, que han desatado una crisis humanitaria de gigantescas proporciones.
Powell, recién llegado a Jartum, la capital sudanesa, advirtió que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas podría interferir si la violencia continúa.
"Estamos viendo indicadores y elementos que nos podrían llevar a considerar la situación como un caso de genocidio, aunque aún no hemos llegado a esa conclusión", explicó el secretario de Estado antes de partir hacia Sudán.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien también arribó el miércoles a Sudán, señaló, por su parte, que si Sudán no protege a la población de Darfur, "la comunidad internacional deberá hacer algo".