Grupos sindicales marcharon ayer, sin incidentes, en protesta contra las políticas del presidente Ricardo Martinelli, en una manifestación que llegó a unas cuadras del Hotel Sheraton, donde se celebra la Cumbre del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA). Una segunda marcha se dirigió a la Corte Suprema de Justicia.
Los manifestantes exigieron a gritos derogar la polémica Ley 30, llamada Ley 9 en 1.
La marcha que llegó a las inmediaciones del Sheraton fue convocada por el Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (CoNATO) y secundada por ambientalistas, trabajadores públicos, estudiantes, sindicalistas y partidos de oposición.
La marcha fue frenada a unas cuadras del hotel por una barrera de antimotines y de autopatrullas.
"Estamos aprovechando la cumbre para alzar nuestra voz a nivel internacional, porque pareciera que se vende hacia afuera un país en el que todo está bien y adentro tiene una población totalmente indignada", dijo la dirigente ambientalista Raisa Banfield.
El secretario general de la Confederación de Trabajadores de la República de Panamá (CTRP), Guillermo Puga, dijo que "este Gobierno no dialoga con nadie sino que simplemente hace su política acomodando las leyes a su manera".
Mientras, representantes del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS) se reunieron con el presidente de la Corte, Aníbal Salas, para pedirle celeridad en la resolución de un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley 30, presentado la semana pasada por el movimiento obrero.