El empleado bancario y propulsor deportivo, Domingo Boyd Trujillo, de 50 años, fue asesinado a las 7:25 a.m. de ayer de tres disparos, en la parada de buses del sector de Santa María, en la vía Ricardo J. Alfaro.
El asesino, luego de cometer el crimen, salió caminando ante la mirada impávida de los transeúntes que presenciaron el hecho sin dar crédito a lo sucedido. Boyd Trujillo, quien tenía 29 años de trabajar en el Chase Manhattan Bank, ahora HSBC, se dirigía a su trabajo cuando le llegó la muerte.
Según un testigo, el asesino viajaba en un autobús y se bajó en la parada de Santa María, donde a los pocos minutos le propinó los tres impactos de bala a Boyd: dos en la espalda y uno en el cuello. El matón era un sujeto de color trigueño, no muy alto y con una cicatriz en la cara.
Después de cometer el asesinato, cruzó la calle y se dirigió al sector de Cerro Patacón. Se presume que el asesino creía que Domingo, por ser empleado bancario, transportaba dinero en un maletín que portaba. Boyd Trujillo deja a seis hijos huérfanos. Era un dirigente deportivo y fiel creyente. |