A la deriva y a punto de ser estrellados con los arrecifes estuvieron 4 funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social mientras realizaban un trabajo de evaluación en las áreas costeras de la comarca Gnöbe Buglé.
La embarcación se averió por un problema en el motor y los fuertes oleajes los llevaron hacia la orilla donde estuvieron a punto de estrellarse con los arrecifes. Allí estuvieron 45 minutos, luchando.
Gracias a la pericia de los capitanes de la lancha, Antonio Smith y Leopoldo Archibold, como verdaderos lobos de mar lograron salvar la embarcación y reparar el motor y poner en marcha la embarcación.
La importancia de conocer el área de navegación permitió que Smith y a Archibold que desde lejos divisaran la embarcación y se percataron de que algo pasaba por lo que decidieron acercarse y prestar ayuda, ya que se encaminaban a un arrecife coralino.
Elizabeth Umaña, coordinadora de la red de oportunidades en Bocas del Toro, Agustín González, y Pedro Quezada iban en la embarcación.