A un día de la tragedia, ¿Por qué pasó? se pregunta insistentemente la madre de Alfonso Ibarra, quien desconsoladamente llora la muerte de su hijo, asesinado de dos disparos, en medio de un consfuso incidente, donde no se descarta ninguna teoría: pasional, venganza, narcótico o algo fortuito.
El inspector Nelson Vega, jefe de la PTJ de La Chorrera, quien encabeza las investigaciones, reveló que en ese despacho se mantienen bajo investigación a dos mujeres que minutos antes del crimen estaban junto a la víctima.
Ayer se llevaron a cabo algunas diligencias en varios sitios que fueron visitados por la víctima como: el hotel en La Chorrera, en donde Alfonso Ibarra había estado junto a su compañera sentimental, una colombiana, cuya identidad no ha sido revelada.
Como parte de la diligencia, personal criminalística de la PTJ, junto con funcionarios de la Personería, llevaron a cabo la prueba de "Ion-Scan", para determinar restos de cocaína en el auto donde fuera ultimado, Alfonso Ibarra, el cual había sido alquilado por su concubina, que tenía solo una semana de haber llegado de Colombia, según trascendió.
Por el momento, la PTJ ha tomado varias declaraciones, que le han ayudado a establecer la hora del homicidio y las personas que estuvieron alrededor del hecho.
Además, especialistas en informática, analizan el vídeo de la cámara del supermercado , tanto de la parte interna como externa, lo cual pudiera dar mayores indicios sobre este homicidio, que es el quinto que se registra en La Chorrera, en lo que va del año.
Su madre, Griselda Rìos, dice que "el era un muchacho tranquilo, nunca, nunca me di cuenta que tuviera problemas de ninguna clase... Mi hijo era tranquilo, yo no me explicó qué pasó".
