Un informe del Departamento de Estado critica fuertemente al Departamento Federal de Investigaciones (FBI) por no haber prestado atención a información clave respecto a los terroristas que se encontraban en el país antes de los ataques del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
El informe del inspector general, Glenn Fine, culpa al FBI por haber perdido cinco oportunidades de descubrir a dos de los secuestradores de aviones antes de los ataques.