Irán calificó de "discriminatoria" y "no constructiva" la postura de los líderes del G8 respecto a las actividades nucleares iraníes, e insistió en que las sanciones "no harán al pueblo iraní renunciar a sus derechos". "El embargo y el aislamiento no afectarán la voluntad del pueblo y del gobierno de la República Islámica en conseguir su indiscutible derecho" a acceder a la tecnología nuclear, dijo, Mohamad Ali Hoseini.