En la ciudad de Los Angeles se jugó el segundo partido de la serie final entre el local y Orlando Magic. Tras un 88-88 vibrante en tiempo regular, ambos disputaron una prorroga que terminó mostrando el oficio del equipo local, que logró sacar la ventaja que se le había negado en el juego: 101-96. Ahora, esta 2-0 para Lakers que el martes viaja a Orlando.
Los locales arrancaron el último cuarto dos puntos por debajo de los comandados por Stan Van Gundy. Rápidamente Bryant comenzó a destacarse, Gasol comenzó a ganar más pelotas y el partido se tornó vibrante, hasta llegar a un minuto final no apto para cardíacos.
La última jugada fue para Los Lakers. Con menos de un segundo, Kobe se elevó, pero Turkoglu se la sacó limpita. Sí, Jack Nicholson, hincha histórico y enfervorizado de los locales, casi se muere.
Orlando entonces pidió tiempo y decidió intentar una jugada final. La misma fue bien ejecutada pero fallada, sobre la chicharra, por Curtis Lee. Así el juego culminó 88-88 en tiempo regular y se iban rumbo a la prorroga. Muy distinto a la paliza que se vio en el primer juego de la serie.
En la prorroga siguió la paridad. Turkoglu siguió siendo importante en defensa y en ataque. Mientras que Los Angeles esperaban que su estrella se termine de encender para llevarse el juego.
A 1m40s para el final, Los Lakers consiguieron la máxima ventaja sobre su rival en el juego: 94-91. En la jugada siguiente, con un doble más falta, logrado por la combinación Bryant+ Gasol, el local se fue a seis de su rival con 1m14s por jugar.
Orlando se puso a cuatro, y después Kobe hizo peligrar el partido con una pérdida a 37s para el final. Pero Howard devolvió gentilezas y cometió una falta en ofensiva que llevó a Gasol a la línea de libres.
Lewis, goleador de la noche, clavó un triple a 26s del cierre y pusó una cuota de misterio en el juego. Orlando cortó rápido con falta, pero los Lakers convirtieron los libres, sumando 14 consecutivos encestados. Así se llevaron el juego por 101-96. El martes se juega el tercero, en Orlando.
