El Ejército de Israel abordó ayer el barco irlandés "Rachel Corrie", el último de la "Flotilla de la Libertad", cuyo fin era romper el bloqueo israelí a Gaza, tras el asalto el pasado lunes a otros seis navíos, que se saldó con la muerte de nueve activistas. El abordaje de ayer no causó víctimas y lo realizaron en aguas internacionales navíos militares israelíes que desde el amanecer navegaban junto a la embarcación irlandesa, cuya tripulación y pasaje no ofrecieron resistencia.