Hoy, el estadio olímpico de Atatürk, con capacidad para 70 mil aficionados, recibirá a los finalistas de la UEFA Champions League, el favorito A. C. Milan y el Liverpool.
Estambul es el centro comercial y la metrópoli más importante de Turquía, esta ciudad fue fundada en el 330 A. C. por el emperador Constantino el Grande, que la bautizó como Constantinopla y en ella alojó la capital del nuevo Imperio Romano; también fue la capital del Imperio Otomano.
En 1984 fue la última vez que el Liverpool gano este torneo, venciendo a la Roma por penales. Al año siguiente se dio un hecho que empañó la competición. El Liverpool enfrentaba a la Juve en el estadio Heysel de Bruselas, aquel día murieron 39 aficionados, 32 eran italianos que quedaron aplastados por una avalancha provocada por los "hooligans", esa vez ganó la "Juve".
El Liverpool busca en Turquía un título que no gana desde hace 20 años e intentará obtenerlo de la mano del español Rafael Benítez. Los de Benítez estuvieron en el grupo integrado por el Mónaco, Deportivo de La Coruña y Olympiacos, donde lograron la clasificación.
En octavos, los "Reds" vencieron en partidos de ida y vuelta 3 goles por 1 al Leverkusen. Acto seguido se enfrentaron a la Juve, venciéndolo 2 goles por 1, y en el Dell Alpi, en medio de disturbios y pancartas ofensivas, empatan y logran la clasificación.
Con sabor a Inglaterra, el Chelsea recibía al equipo rojo, que alcanzó un empate. Con esto, todo se resolvería en Anfield Road. Mientras Mourihno elogiaba a Benítez, Luis García aprovechaba un regalo de Peter Cech para anotar el único y controversial gol.
El Milan, que dirige Carlos Ancelotti, goza de gran tradición en este torneo. Este onceno estuvo ubicado en el grupo F, junto al Barcelona, Shakhtar y el Celtic; los italianos clasificaron sin problemas.
En octavos, el Milan eliminó al Manchester y con su vecino y eterno rival, el Inter, los de Ancelotti fueron superiores. Estando en semifinales, los italianos recibían al PSV y lo venció 2 por 0, pero en el Phillips Stadium, la historia sería otra. El PSV que salió con instinto asesino complicó a los italianos y minimizó el amarrete y tacaño sistema empleado por Ancelotti. En el fútbol juega la suerte y los errores, y eso en los botines de Ambrosini se transformó en el gol clasificación.
FANÁTICOS: ¿A QUIEN LE VAN?
seguramente la balanza se inclinará a favor del Milan, no porque gocen de mayor popularidad en Turquía, sino porque en choques entre equipos turcos e ingleses han culminado con la muerte de aficionados. El último fue entre el Leeds Unite y el Galatasaray, y la muerte de Kevin Speight, de 40 años, y Christopher Loftus, de 36.
