Dinero fácil.
Para los delincuentes los asaltos a los chinos es una forma rápida de obtener plata mal ganada y con poco riesgo.
La mañana del pasado miércoles, un pistolero se presentó a la panadería "Cerro Batea", ubicada en la comunidad de igual nombre, localizada en el distrito de San Miguelito.
De acuerdo con el dependiente del comercio, se trataba de un sujeto de tez clara quien llegó al comercio de los asiáticos y luego los despojó del dinero.
La pareja de chinos tenía sólo media hora de tener abierta la panadería.
En el establecimiento comercial estaban alrededor de cinco clientes, pero al ladrón no le importó y sacó de su cinto el arma de fuego.
Los chinos quedaron sorprendidos y con la mirada perdida, a expensa de los maleantes.
Con palabras de intimidación fueron puestos a la merced del maleante, los chinos, quienes de mal humor entregaron el dinero que había en la caja menuda.
Según Juan, nombre con la cual se identificó la víctima, se desconoce la cantidad exacta del dinero que había en el local comercial.
La Policía estima, según sus cálculos, que el delincuente se llevó B/.30.00.
NO HUBO HERIDOS
Con voz entrecortada y reprochándole a la comunidad, el chino Juan siguió atendiendo su panadería. Agradeció a Dios por estar vivo.