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La plaga de moscas que para ciertos meses se desata en este vertedero, se suma a la lista de problemas en San Carlos.  |
Para muchos de los turistas que frecuentan durante los fines de semana los balnearios del distrito de San Carlos escapa del pensamiento que existan problemas para la disposición final de los desechos sólidos, no sólo por la falta de equipo rodante sino también por los daños ambientales que genera un vertedero a cielo abierto, tal y como existe en los cinco distritos de Panamá Oeste.
El vertedero municipal de Mata Palo, llamado así por el sitio en donde esta ubicado, se encuentra prácticamente cercado por viviendas de pepenadores, y que se establecieron en el lugar años después de que el vertedero ya existiera, las condiciones de la carretera es otro de los problemas y la plaga de moscas que para ciertos meses se desata se suma a la lista.
A la búsqueda de una solución, el alcalde de este distrito, Emilio Salazar dijo estar en conversación con una empresa denominada Guayzteca Enviromental Corporation, la cual estaría utilizando la tecnología proporcionada por dos empresas, una de Austria llamada Intergeo y otra alemana, Farmatic ambas representadas en Panamá por el Ing. Teddy Humbash.
De acuerdo a Dr. Villar García de la Universidad de Columbus y quien representa a la empresa Guayzteca Enviromental Corporation, ya se han sostenido conversaciones con los alcaldes de los municipios de Las Tablas, Chitre y las autoridades de la Provincia de Coclé a los cuales se les ha planteado la idea de que en vez de depositar la basura en los vertederos le sea entregada a la empresa, la cual procedería a empacarla por medio de plantas que se ubicarían en distintos sectores del país.
Estas plantas empacadoras utilizarían métodos científicos para conservar la basura hasta por un período de un día a cinco años.
La Organización de Naciones Unidas (ONU), aprobó recientemente, explica el Dr. García, una ley que debe ser aprobada paulatinamente en todos los países del mundo y que consiste en instar a los países a abandonar la utilización del petróleo como principal fuente de generación de energía para valerse de productos renovables, entre los que se sugiere los desechos sólidos y que transformando producirían energía.
Agrega que en Europa a este proceso se le ha denominado "Gas Verde" y que ha servido para la eliminación de los vertederos existentes.
En Panamá se requeriría establecer unas cinco plantas procesadoras de basurales cuales generarían energía eléctrica, una de las cuales funcionaria para las provincias de Chiriquí y Bocas del Toro, en donde se necesitaría una producción aproximada de 110 mil toneladas de basura al año para ponerla en funcionamiento.
Una segunda planta estaría funcionando para las provincias de Los Santos y Herrera, otra en Colón la cual requeriría de 110 mil toneladas de basura anual; mientras que la que se armaría en la provincia de Panamá incluyendo San Miguelito necesitaría 1,300 toneladas por día
El proyecto trae tres plantas una de las cuales es móvil dependiendo su ubicación de la cantidad de desechos sólidos que se generen en cada región. Las empacadoras transportaran la basura a las plantas procesadoras para la producción del biogas.
En el caso de los desechos hospitalarios, desechos tóxicos y laboratorios se necesitaría una planta que funcionaría como un incinerado y cuya localización depende de un estudio de viabilidad, pero que necesitaría al menos 12 toneladas de basura por día.
La intención de producir energía eléctrica, explica el Dr. Villar García es poder suplir el déficit de 200 megabytes existente y que hubo que comprar a Centro América, además de ello de no necesitarse la energía generada, en Europa se esta produciendo a partir de este proceso gas butano para cocina, con lo cual existen dos opciones; todo lo cual dependerá de que los municipios de Panamá accedan a entregar los desechos que se generen en sus distritos.
A diferencia de los proyectos presentados por otras empresas extranjeras, las cuales solo ofrecen la opción de reciclar la basura para enviarla de vuelta a los vertederos. Otra de las diferencias en que tal proyecto costaría entre 19 y 20 millones de balboas además de que si el proyecto fracasa los municipios deberán efectuar un pago.
La diferencia, sostiene el Dr. Villar es que la empresa Guayzteca Enviromental Corporation no está solicitando aval económico a los municipios, el único aval que esta solicitando el gobierno Alemán, que apoyaría el proyecto, es que los municipios accedan a entregar los desechos sólidos por un período de 20 a 25 años, lo cual deberá quedar plasmado en el contrato final que se formalicen y en los cuales la empresa Alemana se comprometería a aportar un porcentaje de los ingresos que se generen de la actividad a los municipios que participen.
Los contratos se encuentran en estudio y análisis pro parte de la Contraloría General de la República. |