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El ex guardaespaldas presidencial guatemalteco José Obdulo Villanueva asegura que es juzgado por el asesinato del obispo Juan Gerardi, ocurrido el 26 de abril de 1998, por una "venganza" de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado en una entrevista que publicó ayer lunes, el diario local "El Periódico", Villanueva insiste en su inocencia y sostiene que cuando ocurrió el crimen él se encontraba preso en una cárcel de la ciudad colonial de Antigua Guatemala.
El militar es juzgado desde el pasado 23 de marzo junto al coronel retirado Byron Lima Estrada, su hijo, el capitán Byron Lima Oliva, el sacerdote Mario Orantes y la empleada doméstica Juana Margarita López, por el asesinato del obispo auxiliar de Guatemala.
Villanueva aseguró al diario que el proceso en su contra es una "venganza" de la ODHA porque solo fue condenado a cinco años de prisión por la muerte, a principios de 1996, del lechero Haroldo Sas Rompiche.
El campesino fue asesinado en un confuso incidente cuando el presidente Alvaro Arzú paseaba a caballo en Antigua Guatemala. Sas viajaba en su vehículo muy cerca del mandatario y la seguridad presidencial creyó que éste plabeaba un atentado y le dio muerte.
Un testigo del Ministerio Público (MP), el reo Gilberto Gómez, asegura que el militar salió de la prisión la noche del 26 de abril cuando Gerardi fue asesinado a golpes en la cochera de la casa parroquial de San Sebastián, situada a unos 300 metros de la sede oficial del Gobierno.
Otro testigo de la Fiscalía, Rubén Chanax, también afirma que vio a Villanueva en la escena del crimen, pero el militar no da crédito a los dos testimonios.
"Le pido a Dios comprobar mi inocencia y que dicten mi libertad. No creo que condenen a un inocente como yo", expresó Villanueva, quien fue guardaespaldas del presidente Alvaro Arzú (1996-2000).
Villanueva insiste en que a él no le consta nada sobre la muerte del obispo, porque estaba detenido y confiesa que "no pienso nada" de que hayan matado al prelado.
El crimen de Gerardi ocurrió unas 54 horas después de que él revelara su informe de la Recuperación de la Memoria Histórica (REMHI), Guatemala: Nunca más.
En ese informe se documentaron mas de 55.000 violaciones de los derechos humanos durante el pasado conflicto armado, y un 80 por ciento de los casos se le atribuyeron al Ejército y un 7,3 por ciento a la entonces guerrilla. |
