El Gobierno colombiano lamentó profundamente el fallecimiento del cardenal Alfonso López Trujillo, ocurrido en Roma, al tiempo que anunció la expedición de un decreto de honores póstumos.
Así lo asegura un comunicado de la Presidencia de la República, en el que recuerda que el purpurado "fiel a la misión del Pastor, vivió en coherencia, virtudes humanas y espirituales que lo ubicaron como un líder religioso, valiente, coherente y piadoso. Su vida es ejemplo para generaciones presentes y futuras". El documento agrega que el Gobierno colombiano invita a todos los fieles católicos a seguir "las enseñanzas del Cardenal Alfonso López Trujillo".