CHAVES SE MANTIENE INVARIABLE
Gobierno y Congreso venezolanos buscan tregua en conflicto
Caracas
REUTERS
El Congreso y el gobierno
de Venezuela se acercaron el lunes a una tregua en su conflicto de poderes,
pese a nuevas declaraciones del presidente Hugo Chávez en contra
del legislativo y de la Corte Suprema de Justicia.
Chávez, enfrascado en un agrio enfrentamiento con el Congreso
opositor, aseguró el domingo que el legislativo perdió toda
su autoridad, a la vez que prosiguió en su campaña a favor
del "Sí", en un referendo constituyente previsto para el
25 de abril.
Henrique Capriles, presidente de la Cámara de Diputados y representante
del opositor partido socialcristiano Copei, aseguró que el Congreso
está dispuesto a continuar el diálogo pese a las amenazas
del presidente.
El centro de pugna es una ley de poderes especiales, conocida como Ley
Habilitante, que Chávez sometió a consideración del
Congreso y que fue aprobada parcialmente.
Chávez devolvió la ley al Congreso y advirtió que
debe aprobarse "como (yo) quiero", porque de lo contrario decretaría
un estado de emergencia que le permitiría dictar medidas por decreto
sin la intervención del legislativo.
"Esperamos esta misma semana mandar al ejecutivo la Ley Habilitante
aprobada por segunda vez", dijo Capriles en declaraciones a Reuters.
En todo caso, precisó, el estado de emergencia no cambia el poder
constitucional y el congreso sigue legislando.
Una declaratoria de emergencia impediría la realización
en dos semanas del referendo para consultar al pueblo acerca de si está
de acuerdo con una reforma de la Constitución.
Las afirmaciones del presidente renovaron el temor de los políticos
tradicionales acerca de una radicalización de la pugna entre el parlamento
y el teniente coronel retirado, por la ley de poderes especiales.
De inmediato, la oposición política reactivó sus
herramientas para atacar Chávez, a quien acusan de propiciar el enfrentamiento
para justificar el autoritarismo que le atribuyen.
Mientras tanto, la Corte Suprema de Justicia preparaba una declaración
para responder a Chávez, quien también dudó de la legitimidad
del máximo tribunal.
"Todos los poderes están maltrechos, están carcomidos.
No existe la autoridad moral en el Congreso ni en la Corte Suprema de Justicia",
dijo el presidente el domingo, a periodistas.
Analistas políticos e inversionistas coincidieron en que lo que
más preocupa es el lenguaje del presidente, un militar retirado que
dice encarar la lucha contra la corrupción de los partidos tradicionales.
Capriles observó que al hablar de una posible emergencia el presidente
está transmitiendo un mensaje negativo.
"¿Qué inversionista extranjero va a invertir en Venezuela
si el presidente declara un estado de emergencia?" se preguntó
Capriles, de 26 años. "Lamentablemente parece que una confrontación
es necesaria para el presidente incrementar su popularidad", agregó.
Capriles aseguró que el Congreso "va a flexibilizar mucho
la posición y va a dar una carta blanca al presidente", pero
mantendrá su negativa a autorizar algunas medidas, incluyendo un
esquema de refinanciamiento de deuda pública.
Por su parte, Javier Elechiguerra, Procurador General de la Nación
y hombre de confianza de Chávez, aseguró que no se justifica
todo el alboroto que se esta armando actualmente.
"El presidente está realmente convencido de que hay que
pensar fundamentalmente en el país y que hay que esperar que se desarrollen
los acontecimientos. El presidente todavía está esperando
la respuesta del Congreso a la ley que se devolvió", explicó
en declaraciones a la emisora Unión Radio.
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