El Ejecutivo calificó ayer como una acción al margen de la ley que el fiscal electoral, Gerardo Solís ordene una inspección en la Presidencia de la República para conocer el manejo de la partida secreta, y advirtió que adoptarán todos los recursos legales para defender la institucionalidad democrática.
Mediante una imprevista conferencia de prensa en la Presidencia, miembros del gobierno interrumpieron la reunión de Consejo de Gabinete, para informar que la ministra de la Presidencia, Mirna Pittí, ya respondió al segundo cuestionario que remitió Solís, para conocer el manejo de las partidas discrecionales y calificaron como una acción "eminentemente política" y al margen de la ley, ordenar una inspección ocular en el Palacio de las Garzas.
El primer vicepresidente Arturo Vallarino, quien presidió el acto, reiteró que el Ejecutivo tiene el derecho de hacer uso de los recursos legales correspondientes, particularmente cuando se habla de una inspección ocular para el 11 de mayo, "acto que está al margen de la ley".
Añadió que el fiscal no tiene facultades para exigir a la presidenta de la República que muestre el manejo de las partidas discrecionales, además indicó que la mandataria en ningún momento se ha negado a rendir un informe.
Por su parte, la ministra Pittí, sostuvo que respondió a los cuestionarios enviados por el fiscal en el tiempo correspondiente, y afirmó que en ambos contestó en apegó a la verdad.
Pittí dijo no sentirse acosada por el fiscal electoral, pero dijo que la opinión pública ha podido captar la intención que tiene el fiscal.
El ministro de Gobierno, Arnulfo Escalona afirmó que el fiscal actúa políticamente por una denuncia política, y lo acusó de dar un tono elevado de casi candidato presidencial al tema de la partida secreta.