Dos ciudadanos terminaron en el Hospital Santo Tomás la mañana de ayer, martes, chorreando sangre a punta de balas.
Se informó que Luis Rodríguez, de 18 años, fue llevado a las 9:05 de la mañana porque tenía una herida con arma de fuego en el muslo izquierdo. El joven fue baleado en los alrededores de la Calle 15 de Santa Ana, pero dijo que no sabía por qué.
Por otro lado, al mismo nosocomio fue llevado Gregorio Ruiz Vargas, de 64 años, procedente del Edificio La Magnolia, en San Miguel, Calidonia, debido a que una bala perdida se estrelló contra su rodilla derecha.