En estado de alerta se declararon los representantes de la Asociación de Profesores de Panamá "debido a la actitud hostil del Ministerio de Educación, por lo que solicitarán al arzobispo José Domingo Ulloa su cooperación para "procurar un diálogo al más alto nivel que evite un desbordamiento de pasiones", anunció ayer, el subsecretario de la Organización de la Asociación de Profesores, Arturo Adames.
El docente dijo que, al ignorar el Ministerio de Educación sus peticiones, están irrespetando a las organizaciones, ya que quieren imponer un proyecto improvisado e inconsulto.
"Se trastoca la estabilidad del docente panameño y la transformación no llena las expectativas del estudiantado panameño", dijo Adames.
Denunció que, a lo único que se ha dedicado la ministra de Educación, Lucy Molinar, ha sido "denigrar, perseguir y procesar a los dirigentes agremiados a esta agrupación".
Según Adames, en los últimos meses, las autoridades de esta entidad impulsan una campaña psicológica para intimidar a los dirigentes de ASOPROF.
El fin de semana efectuarán un encuentro nacional de dirigentes en Santiago, donde definirán cuándo inicia el paro de advertencia por 24 horas en los planteles educativos.