Cientos de miles de personas en las zonas periféricas de la ciudad de Panamá están enfrentando actualmente una crisis de abastecimiento de agua.
El Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN) ha anunciado que racionará el agua en varios puntos de Arraiján, Chorrera y Panamá Este, debido a que la demanda en estos sectores supera a la oferta, en momentos en que la temporada seca ha bajado el nivel de los ríos que abastecen a las potabilizadoras.
Se trata del primer llamado de alerta a una eventual gran crisis de servicios públicos en estos sectores, tomando en cuenta que el llamado "boom inmobiliario" y el aumento del precio de las tierras en el área metropolitana está empujando a miles de familias de bajos recursos y de clase media baja, hacia las afueras.
Mientras más caros se ponen los proyectos de vivienda céntricos, a los panameños humildes no les queda otra que vivir en Arraiján, Chorrera, Tocumen y otras zonas alejadas.
Sin ningún tipo de control por parte de las autoridades, las promotoras de vivienda en este país están dictando un nuevo orden demográfico, en el que la ciudad es para los extranjeros y los pudientes.
En tanto, las autoridades no han previsto cuáles serán las necesidades de servicio públicos para la gran masa popular que se aleja cada vez más del centro. Lentamente, se están trasladando hacia un desastre urbanístico.
¿Qué pasará en los próximos 5 años, mientras más personas Viva, Crítica en Línean en el Oeste y Este de la capital? El calentamiento global amenaza con intensificar los veranos cada año, y esto significa menos y menos agua para más y más personas. ¿Qué respuestas tienen los candidatos presidenciales para el caos que van a heredar?