Wrestlemanía XXIV, el evento más grande de la WWE, volvió a dejar una huella imborrable en los anales de la historia.
Como todos los años, hubo mucha expectativa por cada una de las 10 luchas, donde las superestrellas de Raw y Smac Down se veían en el cuadrilátero.
Pero entre el Undertaker, quien ahora lleva 16 triunfos consecutivos en este evento, la triple amenaza entre Randy Orton, John Cena y Triple H, la que hizo estallar el Citrus Bowl, de Orlando Florida, fue el choque entre el "Pritty Boy", Floyd Mayweather y el "Big Show".
Para ser simples, era David contra Golliat, mejor dicho un elefante contra una hormiga. Por ser parte de un espectáculo, cualquier cosa podía pasar, además de que había 20 millones de dólares para Mayweather si lograba que el árbitro le cantara los tres segundos al Gigante.
DIFERENCIAS
No había punto de comparación entre ambos contrincantes. Mayweather, quien inició su carrera boxística en 1996, solo pesa 147 libras, con una estatura de 5.8", elementos necesarios para ser el monarca absoluto del peso welter del Consejo Mundial de Boxeo, (CMB).
En tanto, solo la presencia del Big Show intimida. Tiene una estatura de 7 pies y pesa 441 libras, es un animal.
Pero como Floyd Mayweather es el "Pretty Boy", el que no le tiene miedo a nada, "rofeó" como le dio la gana al Big Show, y no contento con eso, hasta le ganó en WrestleManía XXIV.
Esta lucha no fue fácil, el primer plan de Mayweather era huir para que no lo tocaran, pero finalmente lo agarraron, y al momento que el grandulón se disponía a rematarlo con su agarre a la garganta y lanzamiento contra la lona, entraron los guardaespaldas del boxeador, lo que distrajo al Big Show.
Para lograr la victoria, Mayweather utilizó patadas, sillas y una manopla para salir del ring y celebrar con sus seguidores, mientras el Big Show quedó noqueado en el ring.