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Gilberto y su esposa.  |
"Yo le pido al Presidente Bush que cuando se acabe esta guerra me mande a mi hijo de regreso a Colón, porque tengo más de 15 años que no sé lo que es abrazar y darle un beso", dijo con la voz entrecortada por el llanto, Cecilia Richards, madre del soldado colonense Gilberto Ernesto Kennedy Richards, de 21 años de edad.
Es la triste historia de una madre que conoció a su hijo sólo hasta los 6 años, 11 meses y cuatro días. "Eso lo recuerdo clarito", dijo la señora, quien recuerda el tiempo exacto en que dejó de verlo. He tratado de viajar a los Estados Unidos, pero siempre me han negado la visa, pero dijo con sinceridad que intentó entrar escondida y hasta legal, pero se lo han impedido.
Cecilia entre sus manos sostiene muchos recuerdos en imágenes de Gilberto, pero nos dice: "Yo no quiero estas fotos que me ha mandado su papá, es lo único que tengo, quiero a mi hijo conmigo, por que son muchos años sin disfrutarlo".
Los dientes apenas le empezaban a mudar al pequeño Gilberto, conocido por sus amiguitos y familia como "Gunguicito" cuando viajó a los Estados Unidos (Brooklyn) a estudiar en casa de su padre del mismo nombre.
Su madre recuerda con tristeza aquel día que partió Gilberto. "Mami yo nunca me voy a olvidar de ti", fueron sus últimas expresiones, y partió en busca de un mejor futuro, y desde ese momento su humilde cuarto en la calle 5 Avenida Meléndez, se ha convertido en un lugar donde está en todas partes las imágenes de fotografía desde su niñez hasta la actualidad.
Gilberto Ernesto, a sus 21 años, cumplidos el 6 de enero, ya conoce el sabor amargo que deja una guerra, porque lleva tres semanas de estar combatiendo en Irak. Gilberto pertenece al 1st Field Artillery de Oklahoma A Battery, Beath Dealers, Second Platon, y que está por delante en este enfrentamiento que todos conocieron cuando empezó, pero que nadie sabrá como y cuando terminará.
Este joven soldado se casó en los Estados Unidos con una Cabo del Ejército, que al igual que él, el deber también la llamó a la guerra. Los esposos Kennedy se encuentran en un campo muy peligroso, donde abundan las bombas.
Este joven soldado que se crió hasta los seis años en la calle 8 Central y Meléndez conocida como el "Vaticano" le dice por teléfono a su madre, con la que no ha perdido el contacto, cosas que son bellas para ella: "Iré a verte, y ten la fe que estaré con ustedes". |