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Mundo cooperativo

Por: Jorge E. Ruiz | Periodista

Los últimos informes suministrados por la Dirección de Planificación del Instituto Panameño Autónomo Cooperativo (IPACOOP), indican una disminución de dieciséis cooperativas en el 2003 en comparación al año 2002.

Efectivamente, observamos que al 31 de diciembre de 2002 habían registradas como activas 381 cooperativas en todo el país, mientras que al 2003 ésta cifra bajó a 365.

Las cooperativas de servicios múltiples o integrales fueron las que recibieron el mayor impacto al liquidarse seis en ese período. Les siguieron en ese orden las de ahorro y crédito con cinco; las de transporte con cuatro; las de consumo con dos y las de vivienda con una.

Sin embargo, las de producción registraron un aumento de dos nuevas cooperativas.

Es interesante notar, que a pesar de la disminución en el número de cooperativas activas en el 2003, los asociados aumentaron en 20,745 unidades. Las cifras indican que en el 2002 habían 188,214 asociados a las 381cooperativas y en el 2003, el número de asociados a las 365 llegó a la cifra de 208,959.

Se nota en este aumento de asociados la participación activa de la mujer, toda vez que en el 2002 habían 87,000 participando en las actividades cooperativistas y para el 2003 se registraron 102,572.

Por investigaciones acerca de las posibles causas del cierre de las dieciséis cooperativas en el período comprendido entre el 1 de enero de 2003 al 31 de diciembre del mismo año, nos señalaron, entre otras, la falta de controles administrativos y el "gerencialismo". Esto es comprensible porque una parece muy ligada a la otra.

Cuando los directivos de las cooperativas no desempeñan bien su trabajo y están más pendientes de cobrar dietas, por asistir a las reuniones, dejan a la gerencia la toma de decisiones en determinados momentos.

La ejecución del Presupuesto aprobado en la Asamblea tiene que ser administrado por la Junta de Directores y celosamente vigilado por la Junta de Vigilancia. Si ambos estamentos no trabajan armónicamente, sin interfeir uno con las funciones del otro, las posibilidades de éxito son nulas.

Actualmente se está en el período de Asamblea General en la mayoría de las cooperativas. Es imprescindible que se escojan para los puestos directivos a quienes tengan el tiempo para dedicarle a sus cooperativas y más aún, que tengan la capacidad para desempeñarlo bien, respetando la ley, estatuto y reglamentos que rigen en el cooperativismo.



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