Tener el mundo en tu manos hoy día es fácil, como reza un comercial al referirse a la adquisición de tarjetas de créditos, que permiten la compra de todo lo que te puedas imaginar hasta por Internet en cualquier parte del mundo.
Pero está facilidad que da el dinero plástico, puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza, si no manejas correctamente este instrumento al sobregirarte o mejor dicho consumir más de tu capacidad depositada.
La gerente general de la Caja de Ahorros, Mercedes de Lourdes Villalaz, precisó que el renglón de tarjetas de crédito ha registrado un aumento interesante entre el período comprendido entre el 31 de enero del 2003 al igual período del presente año, el número de clientes de tarjetas de crédito, así como el saldo de tarjetas aumentó en un 4 por ciento.
La gerente Ejecutiva de Banca de Consumo del Banco Nacional de Panamá (BNP), Lia H, Gutiérrez, también coincide. Su reporte registra que la cartera de clientes en el 2002 era de 5,069, mientras que al año pasado marcó 7,186.
Estos dos bancos han fijado un tasa de interés a las tarjetas de créditos que va de un 15 a 16 por ciento. Esto también implica un recargo por cada retiro que va de un 3 a 5 por ciento.
El principio de todo, es contar con una estabilidad laborar que te respalde económicamente la tarjeta de crédito que solicites. Como mínimo puedes tener un ingreso individual de B/. 350 hasta B/. 1,5000. Conforme a tu capacidad adquieres una visa con el monto que sustente tus ingresos.
Entre los requisitos para adquirirla están cartas de trabajo, ultima ficha de la CSS y fotocopia de cédula.
DE INTERES: 600 BALBOAS
Se puede uno hacer acreedor a una tarjeta de crédito basado en un ingreso familiar, que supere los B/. 600.