El pívot Dwight Howard sólo necesitó tres cuartos para conseguir un doble-doble de 26 puntos y 15 rebotes, que permitió a los Magic de Orlando ganar ayer por 111-88 a los Suns de Phoenix.
Para los Magic (42-25) fue su primer triunfo en el campo de los Suns, el "US Airways Center", en Phoenix, en nueve temporadas. La última vez que los Magic ganaron en Phoenix fue el 14 de noviembre del 2001.
Los Magic jugarán seis de los próximos ocho partidos fuera de su campo y serán decisivos para la recta final de la liga.
La ciudad de Phoenix había sido la única en el circuito de la NBA en la que Howard no había conseguido un triunfo como profesional.
El ala-pívot Brandon Bass aportó 17 puntos, mientras que el base reserva Gilbert Arenas llegó a los 16 tantos para los Magic, que siguen en la lucha con el Heat de Miami por el liderado de la División Sureste.
Por los Suns (33-31) el base Aaron Brooks, que jugó en sustitución del canadiense Steve Nash, al que se le diagnosticó una "inestabilidad pélvica", aportó un doble-doble de 19 puntos y 10 asistencias.
Nash se perdió el partido por lo que fue denominado como una "inestabilidad pélvica". El entrenador Alvin Gentry señaló que es probable que su armador titular también se pierda el partido del día de hoy lunes por la noche en Houston, ante los Rockets.
Los Suns, que fueron derrotados en su campo por segundo partido consecutivo, también recibieron la ayuda de los reservas, el escolta francés Mickael Pietrus, que consiguió 14 puntos, y del pívot polaco Marcin Gortat, con 12 tantos.
