A diferencia de lo ocurrido el jueves, en los funerales de su compañero de infortunio, el director del INAC, Anel Omar Rodríguez, ayer en la Iglesia San Cristóbal del distrito de Chepo, donde se realizaron las exequias de Samuel Monroy, quien laboraba como seguridad en la compañía Transportes Blindados, no se hicieron presentes altas personalidades gubernamentales.
Una calle de honor de los compañeros agentes de seguridad y las emotivas muestras de dolor de sus seres queridos, fueron el mejor homenaje póstumo que este humilde trabajador pudo recibir.
Elías Monroy, padre de Samuel, exigió que se haga justicia, mientras la hermana, Ely Monroy, dijo estar segura de que si solo hubiera muerto Samuel, no se habrían hecho todos los operativos que se han realizado para dar con la captura de los maleantes.
Foto Hermes González