SAN JUAN. Eran muchas instrucciones y aún el equipo de la isla no se había reportado. Un cordón humano, vestido de pantalones negros y t-shirts amarillo, bordeaba el campo de juego.
La seguridad que lleva consigo el equipo de pelota de Cuba, va más allá de la visita de cualquier presidente a un terreno de juegos.
"Al fin llegaron" dijo un aficionado cubano, refiriéndose a su equipo.
La tropa cubana llegó al Hiram Brithorn cuando apenas faltaban 45 minutos para el partido ante Panamá. No hubo practica de bateo y tampoco tiempo para coger algunas roletas en el campo sintético de San Juan. En ese momento en los parlantes se escucha una voz decir: "La forgoneta blanca, que está al frente del estadio, favor moverla..".
La sospecha de que algún pelotero cubano abandone el equipo, para jugar pelota profesional, siempre está a la vista y las medidas de seguridad son cada vez más extremas.
En lo alto, una avioneta no se cansaba de dar vueltas alrededor del parque de pelota. De color amarillo y una colita azul que decía en letras blancas: "Libertad".
Policías armados, unidades secretas, escoltas privados, todo un despliegue de seguridad, para evitar el contacto de los peloteros con el mundo real.
Afuera.. una manifestación con pancartas y expresiones materiales. Un manifestante aparecía en una celda, supuestamente copia de aquellas que se usan en tierras cubanas, para los que están en contra de su líder.
Volvía y pasaba en lo alto la avioneta. Unos periodistas miraban recelosos a su alrededor. Mi pregunta.. son periodistas o agentes de seguridad.
Luego en la transmisión internacional de ESPN pasaron algunas luminarias cubanas en las mayores. Desde Minh Miñoso, pasando por Luis Tiant y Bert Campaneris. "No pienso en desertar, estoy aquí para ganar el primer lugar con orgullo, para mi país", dijo el cuarto cañón Osmani Urrutia.
Unos que no paraban de mirar a los peloteros cubanos, son los cazadores de talento del béisbol de las grandes ligas. Un agente dominicano, Danny Martínez dijo que el talentoso jugador cubano Yulieski Gourriel puede costar unos 30 millones de dólares en el mercado de las mayores.
El béisbol es el deporte más lindo del planeta, pero la esencia se pierde entre las medidas de seguridad que a veces bloquean el trabajo de la prensa deportiva. Jugadores que son como diamantes.. en el terreno unas joyas y en la vida, muy custodiados.
¡Viva, Crítica en Línea el béisbol!