En una relación de pareja lo que hay que tener presente es la confianza y la comunicación, si no se tienen ambas, entonces se puede llegar a una ruptura.
Sí, tanto hombres como mujeres deben expresar lo que sienten para no guardar resentimientos que pueden llevar a la frustración.
Frases como: "Siempre me dejas sola", "No confías en mí", "No me parece", "No me digas nada", "Siempre es lo mismo" son aquellas que pueden lograr que uno de los dos, el hombre o la mujer, se canse y abandone el nido.
Si no quieres que las conversaciones con tu novio o esposo, se vuelvan tormentosas y naufraguen en medio de grandes y agitadas descalificaciones e insultos, antes de pronunciar una de estas frases u otra similar, muérdete la lengua, cuenta hasta 10 o simplemente ignora la situación, porque en ese momento de irritabilidad puedes decir frases que después te hagan sentir mal, porque ofendiste a tu pareja.
"Algunas de las discusiones más frecuentes y atroces se producen por una serie de frases que lanzamos de forma automática e irreflexiva, casi sin darnos cuenta de sus implicaciones", asegura la terapeuta de pareja y profesora de yoga Francisca Cuenca.
Según Cuenca, pocos términos resultan tan nocivos para la comunicación como "siempre", "nunca" o "tú eres", pues son indicadores de que se entra en el terreno del blanco o negro, del todo o nada, del bueno o malo, de culpable o inocente.
Al final de cuenta, sólo los miembros de la pareja sabrán qué hacer después de una pequeña diferencia.