Aunque varios analistas sugieren que Panamá debe evitar tomar partido frente a la crisis que enfrenta Colombia con sus vecinos de Ecuador y Venezuela, los hechos demuestran que vamos a quedar envueltos, aunque sea por carambola.
El excanciller José Raúl Mulino destacó que la baja del Nº2 de las FARC, Raúl Reyes, parece la "excusa" de dos presidentes como Hugo Chávez y Rafael Correa, que no necesitan mucho para entrar en una guerra con Colombia.
Para Mulino, Colombia debería llevar ante la OEA las evidencias del contubernio de esos dos gobiernos con la guerrilla colombiana.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, visitará Panamá y otros cuatro países para explicar la disputa diplomática con Colombia tras la incursión de militares colombianos a su territorio en un operativo en el que murió "Raúl Reyes", y que el gobierno ecuatoriano califica de agresión.
Ya Correa habló telefónicamente con el mandatario Martín Torrijos.
El vicepresidente y canciller de Panamá, Samuel Lewis Navarro, dijo que "hay que buscar una solución" al conflicto, porque "la temperatura es muy alta, y que se trata de una región muy sensitiva".
Lewis Navarro también negó que Panamá mantenga un pacto de no agresión con las FARC. Esa falsa argumentación -con un "nivel de maldad muy alto"- se difundió desde el inicio del gobierno, expresó el canciller.
Ecuador rompió relaciones con Colombia, y Venezuela expulsó a todos los diplomáticos de Uribe, en Caracas.
Mientras, el director de la Policía de Colombia, general Óscar Naranjo, denunció en base a los documentos incautados a Raúl Reyes- que el gobierno de Venezuela ha aportado 300 millones de dólares y mostró documentos que evidencian vínculos también a Ecuador con las FARC.
Estos documentos, dijo Naranjo, "no sólo llevan implícita una cercanía, sino una alianza armada entre las FARC y el gobierno de Venezuela".