La Comisión del Mercado de Valores (SEC) de Estados Unidos acusó al multimillonario texano Robert Allen Stanford de un "fraude masivo" de 8,000 millones de dólares a través de la venta de "certificados de depósito" del Stanford International Bank Lt (SIB)., con sede en Antigua, con los que prometía "unas altas tasas de interés, improbables e infundadas".
"Estamos denunciado un fraude de magnitudes impactantes que ha extendido sus tentáculos alrededor del mundo", dijo Rose Romerio, director regional de la SEC en Fort Worth, Texas.
SIB tiene 30,000 clientes en 131 países y administra activos por $8,500 millones, una buena parte de los $50,000 millones que el grupo en su conjunto dice tener.
El SIB tenía una entidad afiliada en Panamá, la cual opera desde el año 2003, desde donde ofrece servicios financieros, de corretaje, fideicomisos, asesoría de inversiones, banca comercial privada internacional y bienes raíces.