Varias personas me han preguntado mi opinión sobre la reelección de candidatos a puestos de elección.
Tengo una respuesta que pienso es la más lógica y correcta.
Digo que aquellos funcionarios que trabajaron bien a beneficio de la comunidad se merecen la reelección. ¡Los otros no!
El asunto se complica cuando usted tiene que evaluar el trabajo de diputados, representantes y otros.
Aunque no lo crean, a veces la comunidad no se entera de lo que ha hecho, o ha debido hacer el funcionario que hace cinco años le pidió el voto con muchas promesas.
Hay funcionarios que solamente se acuerdan de los votantes en cada elección. Luego se la pasan disfrutando el elevado sueldo, y le huyen a cumplir sus obligaciones comunitarias.
Así que el panameño en las próximas elecciones debe votar de manera inteligente, no por amistad. Menos porque lo "compraron" con dinero o artículos de consumo.
Pero esto no siempre es así. Hay panameños que no le dan la seriedad al acto de votar. No tienen fe en los resultados, y piensan que al final ganará cualquiera.
Esto ha ocurrido antes, cuando las elecciones se saboteaban. En los tiempos de la llamada "Patria Boba", el robo de urnas era frecuente, sobre todo en el interior del país.
Las actas eran falsificadas. Se daban los votos ya marcados, para depositar a favor de cierto candidato.
Cuando inventaron manchar un dedo con tinta que no se quitaba, algunos bellacos encontraron la manera de borrarla y votar varias veces.
Existían políticos que conseguían cédulas falsas y con ese truco lograban reelegirse.
Aparecían así los conocidos "caciques" de pueblos y provincias.
Sin embargo, no puedo generalizar, porque sería injusto.
Hay funcionarios de elección que sí trabajan por el bienestar de su comunidad, y usted los conocerá con facilidad, pues siempre los verá por los alrededores, buscando soluciones a los problemas y aliviando situaciones negativas.
Esos personajes sí se merecen la reelección, porque se la ganaron trabajando por sus comunidades.
Algunas personas me dijeron que es una "pérdida de tiempo" votar por alguien que ha sido mal funcionario.
Otros con sonrisa me citaron un viejo refrán que dice que "la escoba nueva barre mejor".
Esto puede pasar con candidatos que "no los conocen ni en su casa".