La Contraloría a través de una serie de auditorìas realizadas "no encontró irregularidades ni manejos dolosos" en los fondos destinados para la construcción del Museo de la Biodiversidad, ubicado en la Calzada de Amador, corregimiento de Ancón.
Sin embargo, los auditos establecen que la administración de la Fundación Amador, "no dio un manejo óptimo" a los recursos asignados para el proyecto y ejecutó "una planificación inadecuada" de los fondos, lo cual se tradujo en una omisión en el presupuesto inicial de gastos.