El defensor del Pueblo, Ricardo Vargas, cuestionó ayer la construcción de las nuevas cárceles de mediana y alta seguridad, que implementará el Gobierno de "los locos".
"No creo en la construcción de las megacárceles", dijo.
A criterio del funcionario, los centros penitenciarios que albergan a más de 5, 500 personas son inmanejables, y por esa razón, se prestan para que se introduzcan artículos prohibidos, ya sea por parte de funcionarios como de particulares.
Según Vargas, las cárceles del país "están en condiciones tétricas, y se han convertido en bodegas humanas, sin ninguna posibilidad de resocialización", resaltó el funcionario.
Vargas aseguró que "el sistema penitenciario está en crisis", por ende, requiere de una reingeniería total.
La iniciativa no solamente requiere ser modernizada en las infraestructuras, también se deben dar recursos para que la Ley 55, que reorganiza el sistema penitenciario, se pueda implementar de una manera efectiva.
El Defensor abogó por un nuevo sistema integral orientado y bien definido, de manera que se puedan clasificar y separar a las personas que están detenidas de las condenadas.
FORO EN SEPTIEMBRE
El Defensor del Pueblo adelantó que la entidad organiza el Primer Foro para analizar el tema de las megacárceles y privatización del sistema penitenciario.