El comando de la banda terrorista ETA desarticulado esta semana por la Policía Vasca acumulaba casi 40 kilos de material explosivo en los tres escondites localizados en las proximidades de la localidad de Ondarroa, norte español.
En los tres escondites hallados también se encontraron componentes para preparar artefactos explosivos.
La Policía Autonómica Vasca detuvo a dos personas en Ondarroa en el marco de la operación lanzada este martes contra la organización terrorista ETA que llevó entonces a otras cinco detenciones.