La cacería que ha montado la PTJ al capo beliceño Fernando Requena Duval , dio con el descubrimiento de una red de proxenetismo dedicada a la explotación sexual de niñas de entre los 12 a 16 años de edad.
Las operaciones de esta organización estaban concentradas en barriadas del corregimiento de Pedregal y en áreas aledañas al Centro Comercial Los Pueblos.
Se presume que la cabecilla era la que usualmente iba a las diferentes barriadas y escogía minuciosamente a las niñas, las abordaba, las inducía y luego se las ofrecía a extranjeros cobrando sumas que oscilaban entre los 100 y 500 balboas. La cantidad más elevada se pagaba si la menor de edad era virgen.
Los clientes de esta organización son en su mayoría personas de alto nivel económico, entre las cuales figura un ciudadano de origen asiático, quien aparentemente fue uno de los que pagó una alta suma de dinero por el servicio de las jovencitas.
Las autoridades lograron capturar a dos colombianos y dos panameñas, presuntamente vinculados a la organización, pero aún falta por detener a la cabecilla.
EL DATO
La operación para dar con la captura de las personas vinculadas a este hecho se inició con un dato que vinculaba a Requena Duval con unos colombianos que podían ser ubicados en la ciudad capital, pero al concretizar los operativos se descubrió que estos estaban ligados a un delito mayor, informó el Jefe de la División de Investigaciones Criminales de la PTJ, Wilfredo Hurtado.
LAZOS
Se conoció que uno de los sujetos que se busca por la fuga del capo beliceño, también esta vinculado con esta organización.
Según las investigaciones, la cabecilla de la banda, luego de cobrar el dinero a los extranjeros le daba un porcentaje a las menores.
Hasta el momento hay al menos unas 10 niñas afectadas por este hecho.
Cabe destacar que en la División de Delito Contra el Pudor y la Libertad Sexual de la PTJ existe un expediente por el delito de proxenetismo que inició desde el pasado mes de noviembre por denuncias interpuestas por algunas de las madres de las niñas afectadas, en donde se involucraban a unos ciudadanos extranjeros. Dicha banda se manejaba a nivel de la ciudad capital y se busca establecer con exactitud la cuantía de dinero que la proxeneta le pagaba a las jovencitas.
Los operativos de búsqueda se mantienen a fin de dar con la captura de otras personas posiblemente vinculadas a esta organización. |