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Las declaraciones emanadas del legislador Carlos Afú en las que implica tanto a la alta dirigencia del PRD; como a su bancada legislativa, ha sacado a la luz pública la descomposición política que existe entre quienes dirigen en la actualidad al Partido Revolucionario Democrático.
En artículos que llevan mi firma, nos hacíamos eco de lo que ya era un secreto a voces, el CEN del PRD con sus actuaciones, lleva al Partido a su más espantosa derrota electoral en el año 2004.
Las acusaciones del legislador Afú sobre actos de corrupción dentro del CEN del PRD, no pueden ser soslayadas por el Secretario General del Partido, Martín Torrijos.
No se puede seguir con la tesis que están esgrimiendo algunos dentro del PRD, de que este pueblo olvida, que esto sólo es un nubarrón gris, que pasará muy pronto y aquí no ha pasado nada.
No señores, el descrédito en que los actuales dirigentes han llevado al PRD, por sus constantes actos de traición y ahora de corrupción, han demostrado plenamente que quienes dirigen al P.R.D. no están a la altura que se exige para dirigir un partido de la magnitud que tiene el Partido Revolucionario Democrático.
La opinión pública ha señalado como Oposición Cariñosa, el tipo de oposición que le ha presentado al gobierno, los actuales componentes del Consejo Ejecutivo Nacional desde que fueron elegidos y hoy sabemos con certeza el porqué actuaban así, las palabras del legislador Afú lo han comprobado. Lo que ha dicho este legislador del P.R.D., es grave, pero muy grave, lo cual no puede ser pasado por alto por el Secretario General Martín Torrijos.
Hoy han salido sus comentaristas oficiosos a defender su figura, presentando ante la opinión pública, a un Martín buena gente, confiado, sin malicia, el cual pareciera haber sido sorprendido en su buena fe, ignorante de lo ocurrido, ahora lo han convertido, como dice un medio, en un "Capullito de rosa", ya que si sale puede quemarse en el primer chispazo.
Martín Torrijos quiso ser Secretario General de un partido político como el P.R D., la membresía creyó para elegirlo en el refrán que dice "de tal palo tal astilla", pensaron que el hijo sería la reencarnación del padre, y el desengaño ha sido muy grande.Martín Torrijos tiene una responsabilidad y debe cumplirla con entereza y con gallardía, para ello debe empezar por presentar su renuncia y solicitarle al CEN que haga lo mismo, el Partido no puede seguir un día más con esta dirigencia; de no hacerlo, serán las propias bases, y yo me uniría a ellas, quienes los sacaremos de sus cargos por ineficientes. |
