La reparación de la torre de la iglesia de San Carlos Borromeo, en el distrito de San Carlos, se ha convertido en una de las prioridades para el párroco Karl Madrid, porque parte de la estructura ha comenzado a caerse, lo que representa un peligro para los feligreses.
La estructura construida de cal y canto, decorada con conchas de nácar, ha comenzado a desmoronarse, en parte por los efectos de la naturaleza y la falta de mantenimiento, al ser pocos los recursos económicos con que se cuenta para ello.
Según el sacerdote, durante la temporada de lluvia el agua se filtra por la torre e inunda el interior de la Iglesia y, aunque se han realizado algunos trabajos para evitarlo, no han tenido éxito.