Mier. 20 de enero de 1999

 








 

 


EDITORIAL
Perfil para cargo importante

Las normas contractuales convenidas entre nuestro país y los Estados Unidos establecen los cargos de Administrador y Sub-Administrador del Canal de Panamá, destinos que ahora se cumplen con alternabilidad por nombramientos de alto nivel norteamericano, pero que al llegar el final de la presencia extranjera, deberán designar las autoridades panameñas.

En tal derrotero, actualmente el Administrador General fue designado por Estados Unidos; y asimismo, designado por Panamá para continuar el ejercicio mandatorio una vez revertido el negocio canalero a la soberanía panameña; sin embargo, ya surge la interrogante en torno a quien suplirá al Sub-Administrador saliente, a partir de enero del 2000, y afloran apetitos de personeros cuyas ejecutorias no se acomodan plenamente al perfil que reclama la trascendental posición burocrática.

La realidad canalera muestra áreas sensitivas, que reclaman tratamientos de astucia, de fineza analítica y reciedumbre de mando y ejecución; entre las cuales destaca, con gravedad, los reclamos laborales y las expectativas de trabajadores que aprendieron a negociar al alero de reglamentaciones y acuerdos surgidos del seno de las autoridades norteñas, cuyos extremos difieren gravemente con las fórmulas jurídicas reglamentarias panameñas; situación que levanta suspicacias y alienta temores que pudieran derivar a pronunciamientos y eventos de fricción y conflicto que laceren el desenvolvimiento armónico y pacífico de las labores transoceánicas.

Por ello, acrecienta el criterio de escoger para la referida posición a un profesional que titule amplios y sólidos conocimientos de derecho laboral, de manejo jurídico y de ciencias sociales, que tenga transitados estadios de manejo de conflictos, de negociación colectiva y logros transaccionales, y ostente solidez en sus posiciones y reconocida capacidad para operar bajo presión, sin temor ni cobardías.

De mantenerse estos lineamientos del perfil que defina el candidato al cargo se descalifica de inmediato al Ingeniero Luis Blanco, quien resultaría extraño a las búsquedas descritas, con la agravante censurable de incorporar otro componente perredista a los manejos canaleros, evento que rompería con el predicado de hacer de los asuntos de la vía intermares, punto de agenda nacional, de acuerdo por encima de los partidismos, compadrazgos y amiguismos: razones que nos permite concluir que tal aspiración política perecerá en su cuna, al carecer de respaldos y apoyos ciertos que la propulsen.

El Canal en reversión es aspiración nacionalista; manifestación supina de soberanía, que constituye el reto histórico que debemos enfrentar con serenidad, ánimo constructivo y voluntad patriótica. ...No lo olvidemos.

 

 

 



 

AYER GRAFICO
Ceremonia previa a la firma del Tratado de Montería realizada en Santafé de Bogotá


CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo, sigo sin usar los pasos peatonales


OPINIONES




 

 

PORTADA | NACIONALES | PROVINCIAS | DEPORTES | LATINOAMERICA | COMUNIDAD | REPORTAJES | VARIEDADES | CRONICA ROJA | EDICIONES ANTERIORES


   Copyright 1995-1999, Derechos Reservados EPASA, Editora Panamá América, S.A.