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PERIODISTAS EN COLOMBIA
Sentenciados a pena de muerte
SERVICIOS NOTICIOSOS
Durante la última década (1990-2000), cada año fueron asesinados en este país alrededor de 24 comunicadores sociales de radio, prensa y televisión, es decir, un promedio de 2 periodistas cada mes, cayeron bajo las balas en una guerra que tiene a esta nación al borde del colapso total. Según la Asociación Colombiana de Periodistas, las estadísticas sobre crímenes, secuestros, terrorismo y amenazas, de la que diariamente son víctimas los trabajadores de los medios de comunicación, son verdaderamente terroríficas y escalofriantes, y lo que es peor, hasta ahora no hay un solo capturado o detenido por la comisión de estos homicidios. En la larga lista de víctimas aparecen directores de diarios (Guillermo Cano Isaza, El Espectador; Gerardo Bedoya, El País; Raúl Echavarría Barrientos, Occidente) de noticieros radiales (Jorge Enrique Pulido, Todelar; Alirio Mora Beltraá, RCN; Alfredo Abad López, Caracol), y de televisión como Jaime Garzón, y Alvaro Gómez Hurtado, este último excandidato presidencial. Otros reconocidos periodistas y propietarios de diarios como, Juan Manuel Santos, Daniel Samper Pizano, Plinio Apuleyo Mendoza y más de un centenar, han tenido que solicitar refugio en España, Canadá, Suiza, Holanda, Estados Unidos o Méjico, entre otros. La Asociación Colombiana de Periodistas a través de sus voceros, ha venido reclamando de países vecinos como Panamá, Venezuela, Ecuador y Perú, brindar protección temporal y refugio a varios de sus miembros, quienes se han visto forzados a salir de ese país, por temor a resultar víctimas en el conflicto en donde los grupos enfrentados han declarado a los periodistas "objetivos militares".
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La Asociación Colombiana de Periodistas a través de sus voceros, ha venido reclamando de países vecinos como Panamá, Venezuela, Ecuador y Perú, brindar protección temporal y refugio a varios de sus miembros, quienes se han visto forzados a salir de ese país, por temor a resultar víctimas en el conflicto en donde los grupos enfrentados han declarado a los periodistas "objetivos militares".
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