Ricardo La Volpe sabe que los partidos se ganan en la cancha y esto lo aprendió desde muy joven. El técnico de la Selección de Costa Rica empezó su peregrinar en el mundo del balompié en 1970, desempeñándose como portero del equipo de su natal Argentina, Club Atlético Banfield.
Después de haber pasado algunas temporadas en dicho club, fue traspasado al Atlético San Lorenzo de Almagro, donde permaneció hasta 1979. En ese año, emigraría a México, donde vestiría la casaca del Atlante hasta 1982 y más adelante terminaría su carrera en el Oaxtepec.
Además de haber militado en distintos clubes de América, fue campeón del mundo en 1978 con la selección "albiceleste", como tercer arquero.
DE ESTUDIANTE A MAESTRO
Al término de su periplo como jugador, comenzaría un exitoso recorrido como técnico.
Su paso por liga mexicana fue destacado. Allí asumiría las riendas de equipos como el Atlante, las Águilas del América, "los rojinegros" del Atlas, el Guadalajara y "los diablos rojos" del Toluca, ganando en la temporada 92-93 ante el club Monterrey un campeonato, y dirigiendo al Atlante por global de 4-0.
Con la siguiente mantra: "Mis equipos no deben girar en torno a un solo jugador, esto es fútbol, no tenis", La Volpe ha establecido un sistema de juego, según el cual impera la obtención del resultado y ha sentado un precedente.
Su forma de trabajo se basa en el estudio, a cabalidad, de sus rivales y en la utilización del controvertido esquema 5-3-2, sin enganche clásico, netamente ofensivo, con la posibilidad de jugar con tres delanteros, incluso.
También, fue el entrenador de la Selección de Fútbol de México, durante 4 años, ganando con el "tri" la Copa de Oro de la CONCACAF, en el 2003.
Después de su paso por el fútbol mexicano y rodeado de especulaciones, el 24 de agosto del 2010 asumió el banquillo tico.
La Copa Centroamericana, que comienza hoy, es su primer desafío como timonel de la escuadra.