El presidente de EE.UU., George W. Bush, expresó su voluntad de resolver la crisis nuclear iraní de manera diplomática pero insistió en la conveniencia de referir el caso al Consejo de Seguridad de la ONU.
"No quiero anticipar lo que el Consejo de Seguridad debería hacer, pero es lógico que un país que ha rechazado las aperturas diplomáticas sea referido al Consejo de Seguridad", dijo Bush en una rueda de prensa junto a la canciller alemana, Angela Merkel.
"Debemos colaborar y enviar un mensaje común a los iraníes de que su comportamiento de cara a lograr un arma nuclear es inaceptable", sostuvo el presidente, quien afirmó que "está en el interés de todo el mundo" que Irán no tenga armas nucleares.
Irán amenazó con interrumpir su cooperación voluntaria en el marco de las inspecciones nucleares del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) en caso de ser denunciado ante el Consejo de Seguridad de la ONU por su controvertido programa atómico.
El nuevo embajador iraní ante el OIEA, Ali Asgar Soltanieh, recordó ante la prensa en Viena que el Parlamento de su país adoptó el año pasado una ley que prevé la interrupción de ciertos aspectos de su cooperación con el organismo en caso de ser denunciado ante el máximo órgano de la ONU.