Fiesta musical para conmemorar aniversario de la revolución
Las vitrinas de los comercios estaban adornadas por llamativos letreros que anunciaban las festividades del aniversario de la revolución cubana.

La Habana
AP
El gobierno del presidente Fidel Castro dejó en manos de los mejores y más conocidos cantantes y bandas musicales de la isla los festejos por el 42 aniversario de la revolución realizado en la isla caribeña. En un aparente gesto de recompensa a una población que incesantemente concurrió en el 2000 a las convocatorias oficiales de marchar y protestar, por primera vez en años los actos del 1 de enero fueron una fiesta musical con la participación de bandas y músicos como 'Los Van Van', el cantautor Pablo Milanés, las mundialmente conocidas tonadas de 'Compay Segundo', y una gala de ballet presentando el 'Cascanueces', entre otras actividades programadas. Los actos en la isla, que a diferencia de la mayoría del mundo celebró este año la entrada al nuevo milenio, se realizaron a partir de las 9:00 pm del primer día del nuevo año, tanto en La Habana como en el resto del país, dijo el diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba. El Ministerio del Trabajo en un decreto declaró, "por esta vez", el 2 de enero también como día de feriado nacional. Tras el triunfo de Castro, el 1 de enero fue declarado día de conmemoración nacional y en los años siguientes los actos por un nuevo aniversario incluían concentraciones y discursos oficiales. Pero desde hace ya varios años, la jornada transcurría como un tranquilo domingo familiar, con la población en sus casas o en festejos privados. El día de mañana será para festejos para los niños, y "a fin de que sus padres y demás familiares puedan estar y compartir con ellos ese día feliz, se ha decidido declarar feriado el 2 de enero del 2001", dijo la nota oficial. Desde fines de 1999 y a lo largo de este año, los cubanos protagonizaron decenas de multitudinarias caminatas y concentraciones, en una campaña sin precedentes: lograr el regreso desde Miami a Cuba del balserito Elián González, de siete años. El pequeño, sobreviviente a fines del año pasado de un naufragio donde murió su madre que intentaba llevarlo a Estados Unidos, regresó junto a su padre en Cuba en junio pasado. Pero las jornadas de manifestaciones no han cesado.
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