Al menos 30 personas murieron ayer y más de 50 resultaron heridas a causa del estallido de una carga explosiva que tenía por objetivo un organismo de cooperación canadiense en la ciudad afgana meridional de Kandahar, informó a EFE una fuente oficial.
El portavoz del gobernador provincial de Kandahar, Zelmay Ayoubi, explicó que el ataque pudo haber sido perpetrado con un coche bomba, extremo que no ha sido confirmado.
Según Ayoubi, como consecuencia de la deflagración, varias viviendas quedaron completamente destruidas.