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El ataque que colonos judíos perpetraron ayer contra la población palestina de Hebrón, en el que murió una niña de 14 años y otras 36 personas resultaron heridas, pone de manifiesto la volátil situación en la zona desde que Israel mató al jeque islámico Salah Shahade.
Los colonos, que regresaban del entierro de un soldado israelí muerto el viernes por disparos de milicianos palestinos, abrieron fuego contra varias viviendas palestinas en el casco antiguo de la ciudad y mataron a la menor Nivim Yanyun.
En el tiroteo resultaron heridas otras siete personas, entre ellas uno de los hermanos de la niña, de 22 años.
Otros siete palestinos fueron heridos por las piedras que les lanzaron los colonos y siete más al ser atropellados por un vehículo.
Los colonos atacaron a la población palestina en venganza por la muerte, a manos de las Brigadas de Al Aksa, del soldado Eliezer Leibovitz, de 21 años, que hoy fue enterrado en la ciudad. |
