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Haití acató un llamado de los cancilleres de la OEA para crear, antes del 25 de junio, un Consejo Electoral neutral como paso previo para resolver la grave crisis política surgida tras los cuestionados comicios del año pasado, afirmó este martes el canciller haitiano Joseph Phillip Antoine.
El canciller aseguró a la prensa que el Gobierno haitiano va a trabajar con los partidos políticos de la oposición en la conformación de un Consejo Electoral equilibrado, conforme lo solicita una resolución de la Asamblea General de la OEA en Costa Rica. Tras la renuncia el lunes de siete senadores cuya elección ha sido cuestionada, Haití realizará comicios legislativos anticipados este mismo año, otras elecciones en el 2002 y unas terceras en el 2004, dijo Antoine.
La Asamblea General de la OEA instó a la administración de Jean-Bertrand Aristide a que constituya antes del 25 de junio un "Consejo Electoral Provisional (CEP) creíble, independiente y neutral, como paso necesario para crear un clima de confianza mutua que propicie un acuerdo de base amplia entre el Gobierno de Haití, los partidos políticos, la sociedad civil y otras instituciones pertinentes de la sociedad haitiana".
Esto "con miras a resolver la crisis política y fortalecer la democracia y el respeto de los derechos humanos en Haití", señala el pronunciamiento, que expresa "profunda preocupación" por la continuación de la crisis política en el país caribeño luego de las elecciones celebradas el 21 de mayo del 2000.
La OEA tomó nota de una carta enviada al foro hemisférico en la que Aristide se compromete a adelantar elecciones legislativas para contribuir a la solución de la crisis.
Haití, uno de los países más pobres del continente, está sumido en una grave crisis política desde las controvertidas elecciones legislativas del 21 de mayo de 2000 que ganó el partido Lavalas del presidente Jean-Bertrand Aristide.
La Convergencia Democrática, que aglutina a un sector de la oposición, boicoteó la elección presidencial del 26 de noviembre pasado, que ganó Aristide en medio de numerosos incidentes violentos, y continúa reclamando la celebración de nuevas elecciones.
La comunidad internacional, mientras tanto, mantiene suspendida la ayuda a la nación haitiana.
Antoine afirmó que el gobierno de Haití está corrigiendo las irregularidades electorales comprobadas por la misión de observación de la OEA, pero explicó que la renuncia de los senadores cuestionados no depende del Ejecutivo, sino que son ellos los que tienen que renunciar voluntariamente.
Este año se elegirá a los sustitutos de los siete senadores que renunciaron el lunes, en el 2002 habrá comicios para sustituir a los que hayan dimitido entonces, y en el 2004 habrán nuevas elecciones, dijo el canciller haitiano. |
